La historia de las presidencias asediadas es, al final, una historia de arrogancia – de ceguera a las faltas propias, de sordera a las advertencias, de reclusiĂłn de realidades incĂłmodas. El secreto del poder no es que corrompe; eso es bien conocido. “Lo que nunca se dice”, escribe Robert Cato, en “Maestro del Senado”, sobre Lyndon Johnson, “es que el poder revela”.
• pág. 44, THE NEW YORKER, 8 de mayo de 2017: de un artĂculo titulado ENDGAMES, de Evan Osnos
Belize entrĂł en un perĂodo de crisis sociopolĂtica el miĂ©rcoles 17 de mayo, en Belmopan, cuando los matones encabezados por el presidente del gobernante Partido Democrático Unido (United Democratic Party, UDP), Alberto August, interrumpieron los procedimientos de una investigaciĂłn del ComitĂ© del Senado sobre los escándalos en el Departamento de InmigraciĂłn, y luego asaltaron a tres miembros de los medios de comunicaciĂłn de Belize, incluyendo a una redactora en jefe de esta organizaciĂłn.
Seis dĂas despuĂ©s del incidente en el edificio de la Asamblea Nacional en Belmopan, el martes 23 de mayo, el Sr. August, quien tambiĂ©n encabezaba la ComisiĂłn de Elecciones y LĂmites y encabeza el Servicio de Agua Potable de Belize (Belize Water Services, BWS), ofreciĂł una disculpa personal por los asaltos a los medios mientras anunciaba que habĂa organizado un grupo llamado Beliceños Contra Courtenay (Belizeans Against Courtenay, BAC), con la intenciĂłn de regresar a la sede de la Asamblea Nacional para reanudar las actividades perturbadoras este miĂ©rcoles 24 de mayo. Cabe señalar que el presidente August, el miĂ©rcoles por la mañana del 9 de mayo, habĂa acusado y hostigado personalmente al senador Eamon Courtenay, el senador principal del opositor Partido Unido del Pueblo (PUP), durante su interrogatorio de un testigo. En la mañana del 9 de mayo, el Sr. August no parecĂa estar acompañado, y Ă©l habĂa interrumpido su comportamiento hostil y abandonĂł la Asamblea Nacional despuĂ©s de un rato. VolviĂł con refuerzo una semana despuĂ©s.
La principal razĂłn por la que consideramos que Belize ha entrado en una crisis sociopolĂtica es porque consideramos que el comportamiento del Departamento de PolicĂa en relaciĂłn con la investigaciĂłn del ComitĂ© del Senado del 17 de mayo es altamente cuestionable, incluso sospechosa. La actitud del Departamento de PolicĂa, bajo el mando del Comisario Allan Whylie, ha estado sometida a un profundo escrutinio durante los Ăşltimos tres años, despuĂ©s de la negativa del Comisario Whylie, despuĂ©s de ser ordenado por el Jefe de Justicia Kenneth Benjamin, a investigar los hechos del entonces Ministro de InmigraciĂłn Elvin Penner con respecto al escándalo del pasaporte del Ciudadano Kim. El desafĂo del Comisario Whylie a la más alta autoridad judicial en la naciĂłn nos dio razones para creer que el Departamento de PolicĂa habĂa sido politizado en los niveles más altos.
Tras el escandaloso comportamiento de los agentes del partido gobernante, encabezados por el Presidente del UDP, en el edificio de la Asamblea Nacional el miĂ©rcoles 17 de mayo, no hubo el menor intento, al menos ninguno que fuera visible para esta sociedad, por parte del Departamento de PolicĂa de comenzar a manejar los procedimientos del ComitĂ© del Senado de cualquier manera proactiva.
Recuerden ahora que la presencia de la policĂa el 17 de mayo habĂa estado en un mĂnimo absoluto en el edificio de la Asamblea Nacional y no hay razĂłn para creer que se hubiese emitido una alarma urgente incluso despuĂ©s de que se interrumpieran los procedimientos del ComitĂ© del Senado y despuĂ©s de que comenzara un comportamiento agresivo por los soldados UDP.
En medio del silencio oficial estudiado del Departamento de PolicĂa, incluso despuĂ©s de que el Presidente August anunciara que Ă©l y sus soldados estarĂan regresando a la investigaciĂłn del ComitĂ© del Senado este miĂ©rcoles 24 de mayo, el opositor PUP pidiĂł un aplazamiento de la audiencia del 24 de mayo porque, a como lo entendemos, tenĂan razĂłn para creer que la volatilidad en el edificio de la Asamblea Nacional serĂa peligrosa y descontrolada. Esta es nuestra comprensiĂłn de la razĂłn del aplazamiento del 24 de mayo, y ciertamente queremos escuchar más de la OposiciĂłn sobre este tema especĂfico.
De quien el pueblo de Belize deberĂa haber escuchado en primera instancia, despuĂ©s de los asaltos del 17 de mayo y hasta el momento actual, es del Departamento de PolicĂa. Encargados como lo están, del mantenimiento de la ley y el orden nacional, la PolicĂa debiĂł haberse movido rápidamente para asegurar a todos que tienen control de la situaciĂłn en el ComitĂ© del Senado/el edificio de la Asamblea Nacional ahora y a futuro. Esto no ocurriĂł. El Departamento de PolicĂa está desaparecido en acciĂłn, como dirĂamos. ÂżQuĂ© diablos está pasando aquĂ?
Una razĂłn secundaria detrás de nuestra creencia de que Belize ha entrado en una crisis sociopolĂtica tiene que ver con el nivel vitriĂłlico de la ira y agresiĂłn que mostrĂł el grupo del Presidente August, sus temerarios ataques pĂşblicos contra los medios de comunicaciĂłn y la aparente voluntad del Gobierno de Belize de ver un enfrentamiento desarrollar entre los elementos que quieren ver la investigaciĂłn del ComitĂ© del Senado continuar y los elementos que quieren llevar las audiencias a un alto tan pronto como sea posible. Hay una polarizaciĂłn sociopolĂtica que ha sucedido alrededor de las audiencias, y es la responsabilidad constitucional del Gobierno de Belize mantener un clima de ley y orden que permita un discurso razonado e inteligente. En este asunto, sin embargo, la administraciĂłn Barrow ha expuesto el hecho de que es un jugador en el juego del comitĂ© del senado, que en realidad está dirigiendo la campaña de los que desean parar la investigaciĂłn de Aldo Salazar.
Nos recuerda, como nota histĂłrica, de la tarde del jueves 2 de abril de 1981. Belize todavĂa era una colonia británica autĂłnoma. El gobernador británico, Hennessey, declarĂł estado de emergencia despuĂ©s de que un asesinato en el Municipio de Corozal durante una marcha polĂtica la mañana del jueves 2 de abril, lo convenciĂł de que la crisis sociopolĂtica de Belize, precipitada por el Preámbulo de Acuerdo, habĂa entrado en una fase donde los seguidores del gobernante PUP y partidarios de la oposiciĂłn decidieron luchar violentamente los unos contra los otros.
(Incidentalmente, a lo mejor de nuestra recolecciĂłn, hay siete beliceños todavĂa vivos que eran miembros del Gabinete PUP en el momento en que Hennessey se hizo cargo: Fred Hunter, Florencio Marin, Sr. Valdemar Castillo, la Sra. Jane Usher, Sam Waight, Said Musa y Assad Shoman.)
El Comisario de PolicĂa de la Ă©poca era Esmond Willoughby, y era la sensaciĂłn en los cĂrculos del PUP, antes del estado de emergencia, que Willoughby estaba tomando instrucciones del gobernador Hennessey. El viceprimer ministro/ministro del interior, C. L. B. Rogers, estaba en desacuerdo personal con Willoughby. El gobernante PUP no estaba contento con su propio ComPol.
En el presente caso, el de mayo de 2017 en el Belize independiente, no hay razĂłn para creer que el Comisario Whylie estĂ© tomando instrucciones del Gobernador General, el Caballero Colville Young, quien es el representante de la Reina de Inglaterra en Belize. Por el contrario, hay razones para creer que el Comisario de PolicĂa está actuando de acuerdo con lo que percibe como los intereses del gobernante Gabinete UDP de Belize. El ComPol ha sido politizado. Esto no es como deberĂa ser, y lo que hace la politizaciĂłn del ComPol es exacerbar las tensiones sociopolĂticas en Belize. La percepciĂłn del pueblo beliceño, a medida que escribimos, es que el sistema de justicia aquĂ ha sido comprometido. Esto constituye una crisis sociopolĂtica.